jueves, 29 de noviembre de 2012

Veinticuatro Oportunidades


Sus primeras dos horas fueron dependientes, las siguientes cuatro estuvieron presentes, otras oportunidades, descubrir que lo rodeaba para luego seguir adelante. Tres horas más y momento de transición, recuerda las dos horas posteriores y las guarda en su corazón. Cinco horas, ya pasó la mitad del camino, vida formada, marcado ya está su destino. Seis horas de dejarse llevar, vivir y disfrutar, las últimas dos horas fueron esperar lo inevitable, maduró y demostró que el tiempo es indomable.

24 horas, solo un día, eso es lo que vive una mariposa, imaginate tratando de vivir todos tus momentos en ese tiempo.