Nunca
pensé que esto iba a terminar así, yo, esperando de tu boca un “si”. ¿Qué pasó
que te pusiste en mi camino y que de un momento a otro me hiciste sentir vivo?
Me tenés en vela, aguardando tu respuesta. Una vez más caí en este sitio, pero
esta vez parece que va en serio. Me seguís hablando, solicitándome, halagándome,
no somos uno porque somos libres.
Y ahora te vas, con cierto grado de culpa, supongo que mínima, esto es un
círculo que no termina. Por partes me dejás de lado y yo también dejo mucha
gente, pero lo tuyo es diferente, o eso quiero pensar, para poder
tranquilamente escapar.
¿Estar enamorado? No creo, pero decime ¿Qué es esto en mi pecho cuando te
escucho decir “te quiero”?